Starbucks acaba de anunciar que en 2011, en que cumple 40 años de su nacimiento, llevará su logotipo al próximo nivel. No es un cambio sumamente radical, simplemente es el siguiente paso, la evolución natural. El cambio ya ha dado la vuelta al mundo. Miles de fanáticos de las cafeterías han comentado al respecto. Las opiniones se dividen prácticamente a la mitad. La mitad lo aman, la mitad lo odian.

Es simpático, porque nunca se le puede dar gusto a todas las personas. Hace dos meses Gap intentó hacer lo mismo, pero diferente. Utilizaron el método tradicional. Simplemente de un día para otro cambiaron el logotipo de su página de Internet. Seguramente pensaban irlo cambiando de todos los puntos de venta poco a poco en los meses siguientes. De pronto, el mundo enloqueció. Todos los clientes de la marca comenzaron a hablar. Fue una explosión de las redes sociales. La gente empezó a rechazar públicamente el logotipo. Miles y miles de comentarios se presentaron en Facebook, Twitter y la página de Gap.
Y como pasa en los anuncios del Monte de Piedad: Tan rápido como se fue, regresó. Gap tuvo que volver a su antigua caja azul marino plana y letras alargadas. Por supuesto que publicaron un comunicado de prensa disculpándose y diciendo que siempre no. Me pregunto cuánto dinero habrá hecho el diseñador que contrataron. Apuesto que una millonada, pero si lo pone en su curriculum, no creo que pueda esperar muchos nuevos clientes.
Volviendo a Starbucks, ellos lo hicieron a la nueva manera. Crearon un micrositio especialmente diseñado para informar a los fans del cambio. No hicieron el cambio sin previo aviso, sino que lo publicaron y harán el cambio efectivo en marzo. El CEO de la compañía les habla directamente a los clientes y les aclara que la nueva imagen «honra su herencia» y los tranquiliza confirmándoles que «Starbucks seguirá siendo el mejor café del mundo».
Las opiniones de los fans están dividas al 50%, y seguramente así lo estaban las de los fans de Gap, pero todo es cuestión de la forma. El cambio en Starbucks es inminente, se nota en el tono de su comunicación, ningún comentario de Facebook hecho con el hígado lo impedirá.
Personalmente, a mí me gusta el nuevo logotipo. Creo que es muy adecuado para la época actual, al mismo tiempo que amplía la visión del negocio. Y además, ¿para qué tanto escándalo? No cambió tanto.
Tienes razón no cambio tanto y se ve padre!