
Siempre que veo esta foto, se me antoja ese cupcake. Hace poco tomé un curso sobre emprendedores. Hoy está de moda ser emprendedor. No por nada, el slogan de una de las mejores universidades de México es «Espíritu emprendedor con sentido humano». Ser emprendedor significa detectar una necesidad, ya sea que no esté cubierta o que no se satisfaga de manera correcta, y ofrecer una solución creativa y diferenciada para hacerlo.
Hace poco, tuve la oportunidad de visitar un negocio de este tipo. Todos sabemos que los cupcakes están de moda. Sin embargo los dueños de este negocio fueron una de las razones para que esta moda llegara a nivel nacional en Estados Unidos e incluso, a nivel internacional. Ellos visitaron una tienda de cupcakes en Nueva York y se preguntaron por qué no eran una opción popular como postre, incluso por encima de los pasteles.
Una de las razones más importantes era la presencia de cupcakes en la vida de las personas y otra era el sabor de los mismos. En ese momento, no había cupcakes que supieran deliciosos. Así que pasaron dos años probando e inventando recetas de cupcakes y se dieron a la tarea de abrir su primer tienda en Beverly Hills, donde rápidamente se volvieron populares y están en proceso de expansión por Estados Unidos y el mundo.
Cuando probé el cupcake de la foto, lo hice con un poco de reservas, pero me quedé impresionado con el sabor. Nadie podría decir que es malo. Adicional al sabor, el negocio tiene un toque propio, desde la decoración, hasta el hecho de que hay un cajero automático de cupcakes para llevar y una tienda móvil en una camionetita. Así, rápidamente se volvieron populares hasta el grado de vender miles de piezas al día.
Eso es un emprendedor, alguien que ve un negocio de manera diferente y cambia el mundo, aunque sea un poco en su paladar. Si pasan por Berverly Hills, no dejen de visitar Sprinkles Cupcakes, no se van a arrepentir.