Hace mucho tiempo que no escribo nada aparte de las frases semanales (las cuales he publicado ininterrumpidamente desde el primer lunes del 2014, así que hemos cumplido el propósito de año nuevo hasta ahora). Así que volvamos a las andadas para hablar de otros temas, como el cine, por ejemplo.
Tengo que admitir que todo este tipo de películas no son mi fascinación, de hecho ya no veo ninguna película de este tipo, aunque le di la oportunidad a Maléfica por ser de Disney, pero no fue distinta a las demás.
La historia de La bella durmiente, conocida por todos ahora llega con un enfoque distinto, desde la óptica de una de las villanas más famosas de la pantalla. No es más que un reflejo de la actualidad de los tiempos. Hoy en día los villanos desaparecen o se desvanecen. Ya los malos no son tan malos y los buenos no son tan buenos. Socialmente hemos desaparecido los blancos y los negros y vivimos inmersos en el gris. Por un lado esto es bueno, porque nos vuelve menos rígidos y por el otro puede ser peligroso porque perdemos la brújula del bien y el mal.
Resulta que Maléfica de mala solo tiene el nombre. La villana solo es una víctima de las circunstancias y no un ser diabólico como nos lo habían mostrado. Durante la historia, hay varios momentos donde entendemos lo que la llevó a imponer el malvado hechizo sobre la princesa Aurora. Creo que Angelina Jolie fue la actriz adecuada para representar al personaje que está todo el tiempo en la línea de lo bueno y lo malo, puede ser un reflejo de sí misma.
Fuera de mi opinión personal, la película es predecible desde el inicio. Por las circunstancias que presenta, puedes suponer lo que pasará al final. Gráficamente es muy atractiva. En fin, una buena película para comer palomitas (tal vez si hubiera comprado unas la hubiera disfrutado más).
¿Qué opinan?