Este fin de semana se estrenó Jurassic World, que superó a la primera entrega de Avengers en taquilla colocándose como la película más exitosa de la historia en su primer fin de semana de exhibición.

Supongo que para hoy, la gran mayoría de la gente la ha visto, pero vale la pena comentar algunos puntos. Es una de las películas más entretenidas de este año. En ningún momento volteas a ver la hora, ni sientes que ya duró mucho tiempo.

Lo mejor que tiene, a mi punto de vista, es que nos deja ver el parque con el que soñamos de niños. Finalmente está abierto y operando. Más de 45 minutos de la película nos muestran cada una de las atracciones, pero vale la pena totalmente.

La historia no tiene una gran dimensión. Si me lo preguntan, es incluso menos profunda que Jurassic Park III. Sin embargo, da el pretexto necesario para que podamos ver varias persecuciones y agresiones de dinosaurios con dinosaurios, dinosaurios con personas, personas con personas y más. Todo cobra una nueva dimensión cuando, para variar, a los dueños del parque se les ocurre empujar la genética un paso más allá y crear un dinosaurio nuevo.

Además, para los fans de la cinta original, traen varios recuerdos a la mente. La película que hizo que nos dieran miedo los dinosaurios regresa, más grande, más ruidosa y con más dientes. No es una gran película, simplemente es una muy buena manera de pasar el rato.

Extra para tu entretenimiento

Por si tenías duda de quién ganaría en una batalla entre los dinosaurios más famosos de la saga, te dejo un video que puede resolverlas. Un paleontólogo, asesor en la película, nos contesta: