¿Eres responsable de los horrores que pasan en tu vecindario?

Esta imagen es la captura de un video en que una mujer alemana sale corriendo en shock después de haber sido obligada por los soldados estadounidenses a ver el campo de concentración de Buchenwald justo al terminar la segunda guerra mundial. En algunos de los campos de concentración, los civiles alemanes fueron obligados incluso a levantar cuerpos de judíos asesinados y llevarlos a las fosas comunes. En otras ocasiones, se les mostraban los restos de la guerra, como huesos que los nazis recolectaban de cientos de personas o pelucas que se fabricaban con pelo de los prisioneros asesinados y muchas cosas más.

Acabo de descubrir escenas como estas en el documental: #AnneFrank, Parallel Stories. Debo decir con vergüenza que no recuerdo que en ninguna clase de historia me hayan enseñado esto. O bien los profesores nunca nos lo dijeron o no puse atención. Pero es una acción tan fuerte, que creo que lo hubiera recordado.

¿Cómo se termina con una guerra? Estoy seguro de que no hay un manual escrito para eso. Pero el hacer que los civiles vean de primera mano las atrocidades cometidas por su ejército y su gobierno, parece un buen comienzo.

Todos estos civiles no estaban involucrados directamente en la guerra. Incluso, algunos declaraban que no sabían de los horrores que estaban ocurriendo en su mismo vecindario, en su patio de atrás. Claro, cuando son testigos de lo que ahí ocurría, vomitan, se desmayan, lloran o entran en shock. No es para menos. Ver a cientos de personas muertas y apiladas, o descuartizadas es algo que pone a temblar a cualquiera, no sin pasar antes por un grupo de judíos que seguían vivos, pero que físicamente parecían muertos… en los huesos, sin pelo, sin energía.

¿Por qué obligar a experimentar este trauma a los ciudadanos? Para que la historia no se repita. Para quitarles la venda, para desaparecer las excusas, para ponerlos cara a cara con la realidad. Es decirles con hechos: «Esos horrores sucedieron. Y ocurrieron a pocos kilómetros de donde vives. ¿Y tú que hiciste al respecto? Nada». La respuesta sistemática a esto es: «No sabía». Y claro que puede ser verdad. Claro que no sabían que a los prisioneros les arrancaban uno a uno los dientes y muelas para almacenarlos. Claro que no sabían que 3 o 4 prisioneros dormían en la misma «cama» de madera. Claro que no sabían que había miles de personas asesinadas en ese lugar.

Lo que sí sabían es que la economía de su país iba creciendo. Lo que sí sabían es que iban camino a ser los líderes del mundo. Lo que sí sabían era que estaban en guerra y que iban ganando. Claro que sabían que tenían prisioneros en esos campos de concentración. Lo demás, los horrores que se provocaban en su nombre y a las afueras de sus ciudades, decidieron no saberlo.

Es complicado juzgar esto, no se puede entrar a la mente y a la conciencia de cada persona. Pero es importante tratar de entender lo que pasaba por su cabeza en ese momento. Y lo digo porque hoy también vivimos en un mundo donde podemos decir «no sabía». «No sabía que maltrataban y mataban a tantos migrantes». «No sabía que miles de niños con cáncer mueren porque les falta un tratamiento adecuado». «No sabía que hay 700 millones de personas sin agua potable a menos de 3 horas de distancia de sus casas».

¿Qué no tenemos que hacer algo por estos horrores que existen en nuestro planeta, en nuestro país, en nuestra ciudad o en nuestra empresa? ¿O mejor decidimos no saberlo? ¿Pensamos que no saber nos exenta de la responsabilidad de hacer algo? Hay que tener mucho cuidado con esta ignorancia culpable. Porque no saber no es lo mismo que no querer saber.

Nuestra responsabilidad en este mundo inicia conociéndolo y ya que lo conocemos, asumiendo lo que hay que mejorar, aunque no sea nuestra responsabilidad directa.

«It happened, therefore it can happen again: this is the core of what we have to say. It can happen, and it can happen everywhere».

Primo Levi, sobreviviente del holocausto.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s